Pasos generales para obtener una Certificación ISO
La certificación ISO (Organización Internacional de Normalización) se ha convertido en un distintivo de calidad y eficiencia que las empresas buscan obtener para demostrar su compromiso con estándares rigurosos.
La misma mejora la credibilidad y fortalece los procesos internos y capacidad para satisfacer las expectativas de los clientes de las empresa.
En ese sentido, a continuación mostramos los pasos generales que una compañía debe seguir para obtener una certificación ISO, con el objetivo de mejorar y trabajar en sus estándares de sostenibilidad.
Certificación ISO: Pasos
Selección de la norma ISO adecuada: Determinar qué norma ISO es relevante para el sector y el enfoque de la compañía, pues cubren una amplia gama de áreas: gestión de calidad (ISO 9001), gestión ambiental (ISO 14001) y seguridad de la información (ISO 27001), por ejemplo.
Evaluación Inicial: Realizar una evaluación interna para identificar las brechas entre sus prácticas actuales y los requisitos de la norma ISO elegida para obtener una visión clara de lo que debe mejorar para cumplir con los estándares.
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Planificación detallada: Con base en los hallazgos de la evaluación, se crea un plan detallado que establece cómo la organización abordará las áreas de mejora, como la implementación de nuevos procesos, capacitación del personal y asignación de recursos.
Implementación de cambios: Comenzar a implementar los cambios necesarios en sus operaciones y procesos para cumplir con los requisitos de la norma ISO, siendo esencial involucrar a todos los niveles de la organización en este proceso.
Documentación: Se crea una documentación exhaustiva que detalla los nuevos procesos, procedimientos y políticas implementados, clave para demostrar el cumplimiento durante la auditoría.
Auditoría interna: Antes de la auditoría oficial, la empresa realiza una auditoría interna para asegurarse de que todos los cambios se hayan implementado correctamente y se estén siguiendo.
Selección de la entidad certificadora: Elegir una entidad de certificación reconocida y confiable para llevar a cabo la auditoría externa para evaluar si la compañía cumple con los requisitos de la norma ISO, como por ejemplo Bureau Veritas S.A.
Auditoría externa: La entidad certificadora realiza una auditoría exhaustiva de los procesos y operaciones de la organización para determinar si cumple con los requisitos de la norma ISO (revisar la documentación, entrevistar al personal y observar las prácticas en acción).
Acciones correctivas: Si se identifican deficiencias durante la auditoría externa, la empresa debe tomar medidas correctivas para abordarlas y garantizar el cumplimiento total.
Certificación: Si la institución pasa la auditoría externa y cumple con todos los requisitos de la norma ISO, se le otorga la certificación.
Una vez con certificación en mano el trabajo no acaba, pues se debe estar atento al mantenimiento y mejora continua, dado que tiene que conservar sus estándares y procesos a lo largo del tiempo para buscar oportunidades de mejoras, y seguir cumpliendo con los requisitos, además de adaptarse a los cambios en su entorno operativo.
