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Holcim invierte en tecnología para desarrollar hormigón carbono-negativo

Holcim North America, empresa líder de materiales de construcción, ha anunciado una inversión en Blue Planet Systems, un proveedor de tecnología para capturar las emisiones de carbono en agregados que pueden hacer que el hormigón sea carbono-negativo.

La producción de cemento, un ingrediente del hormigón, representa aproximadamente el 8% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono, con más de 900 kg de emisiones de CO2 generadas por cada 1.000 kg de material producido.

La tecnología de mineralización de Blue Planet combina el CO2 residual con el calcio procedente de los residuos para producir un agregado de piedra caliza sintética.

El proceso de mineralización puede consumir residuos industriales, como el hormigón reciclado, el polvo de los hornos de cemento y la escoria, y producir nuevos áridos. Cada tonelada del agregado tiene la capacidad de mineralizar hasta 440 kg de CO2, evitando su emisión a la atmósfera.

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Soluciones más limpias

Holcim North America, formada por las empresas de soluciones para la construcción Lafarge Canada y Holcim US, y Blue Planet tienen previsto iniciar una colaboración estratégica para identificar el uso de la tecnología de mineralización para reducir aún más la huella de carbono de las operaciones de cemento, áridos y hormigón de las empresas, con la posibilidad de ampliarla a otras operaciones del Grupo Holcim.

Toufic Tabbara, jefe de región de Holcim en América del Norte, dijo: “Nuestra inversión ofrece una oportunidad crítica para influir en el desarrollo de futuras tecnologías mientras que, al mismo tiempo, hacemos crecer nuestra red de empresas afines con el mismo fuerte enfoque en el cero neto para amplificar los esfuerzos globales junto con otros inversores de Blue Planet“.

Por su parte, Brent R. Constantz, director general de Blue Planet Systems, señaló que “Al centrarse en el componente de los áridos del hormigón, nuestra tecnología puede influir más en el carbono incorporado en el hormigón que el enfoque tradicional de reducir únicamente el componente de cemento”.

“La colaboración con Holcim nos permite aplicar nuestra tecnología de mineralización del dióxido de carbono a las operaciones de cemento a gran escala, donde esperamos que se aborden más directamente las emisiones de CO2“, explicó Constantz.

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Redacción | Antonio Vilela

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