Colombia perdió 171.685 hectáreas de bosque por la deforestación en 2020
Carlos Eduardo Correa, ministro de ambiente de Colombia, presentó las cifras de deforestación de 2020 en el país y las del primer trimestre de este año en un foro público, en el cual se mostró evidencia de un incremento del 8% con respecto a 2019.
Esto representa, de acuerdo al ministro, una amenaza a la biodiversidad y genera un impacto social para las comunidades que habitan las regiones más afectadas por este flagelo.
En cifras específicas, el 70 % de la tala de bosques se ubica en Meta, Caquetá, Guaviare, Putumayo y Antioquia. En la Amazonia se deforestaron más de 109.000 hectáreas, aunque en el primer semestre de 2020 se evidenció una reducción en la selva amazónica, aseguró.
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Un ambiente más frágil para los bosques
Una de las principales causas a escala mundial de la pérdida de bosques es la creciente domesticación de estos, pues son modificados para ser usados por y para industrias.
A este fenómeno se le conoce en ocasiones como praderización y el ministro lo ha mencionado como una causa de riesgo climático.
Específicamente, la praderización de terrenos para el acaparamiento de tierras de manera ilegal lidera el camino negativo. A esto se suman las malas prácticas de ganadería extensiva, la infraestructura de transporte no planificado, los cultivos de uso ilícito, la extracción ilícita de minerales, la tala ilegal y la ampliación de la frontera agrícola en áreas no permitidas.
Sin embargo, las cifras también han mostrado que las actividades del gobierno de la mano de Minambiente han surtido efecto en cuanto al control de la deforestación.
Motivado a lo antes expuesto, para el primer trimestre de este año las cifras de deforestación se redujeron para los principales departamentos afectados por esta problemática.
Colombia mira al futuro
Colombia ha avanzado con aprobaciones para proteger su capital natural, con una especial dedicación a los bosques.
Este paso lo dio en primer lugar a la penalizazión la deforestación, que se ha desarrollado a través de un trabajo conjunto con organizaciones ambientales que monitorean los terrenos para controlar riesgos.
En Colombia se han establecido el reto de alcanzar cero deforestación para el 2030, aunque sea una meta difícil.
Redacción | José Luis Álvarez Escontrela