IFC concede línea de financiamiento para fortalecer el mercado hipotecario destinado a mujeres en México

La Corporación Financiera Internacional (IFC, por su siglas en inglés), que forma parte del Grupo Banco Mundial, ha destinado una línea de crédito de hasta MX$1.000 millones de pesos a HIR Casa (Bienes Programados S.A, de C.V.) con el propósito de fomentar el financiamiento hipotecario en México.

La mayor parte de los fondos se dirigirá hacia la provisión de financiamiento hipotecario a mujeres interesadas en adquirir viviendas en México.

La colaboración con IFC fortalecerá la misión central de HIR Casa: brindar a un mayor número de familias la oportunidad de convertirse en propietarias de sus hogares, a través de un producto hipotecario atractivo diseñado para comprender las dinámicas económicas familiares, en especial aquellas lideradas por mujeres en el país.

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“El otorgamiento de crédito hipotecario en México se concentra en unos pocos bancos. Con este crédito, IFC contribuye a promover un modelo innovador de financiamiento hipotecario en el mercado proveniente de una Institución Financiera No Bancaria (IFNB)”, asegura Juan Gonzalo Flores, Country Manager de IFC en México

“Además, la inversión cuenta con un sólido ángulo de género: más del 50% de la cartera se centrará en mujeres, las cuales cuentan con un menor acceso a préstamos para vivienda en el país”, prosiguió.

IFC aplica el factor social de los criterios ESG

El entorno del financiamiento de viviendas en México se halla obstaculizado por diversas barreras: baja inclusión financiera y la problemática vinculada a la verificación de ingresos variables.

Según estadísticas de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), solamente el 39% de los préstamos hipotecarios en el país se otorgan a mujeres.

Además, únicamente el 4% de los adultos mexicanos cuentan con un préstamo para la adquisición de vivienda, cifra inferior al promedio del 7% en América Latina y el Caribe.

La principal razón de la escasez de créditos hipotecarios en México radica en que entre el 55% y el 60% de la población trabaja en el sector informal o en actividades económicas de naturaleza mixta, lo que implica ingresos variables o no declarados, dificultando su elegibilidad para las hipotecas tradicionales ofrecidas por los bancos.

En el caso de las mujeres, enfrentan obstáculos adicionales, ya que, de acuerdo con datos del Banco Mundial, la participación femenina en la fuerza laboral en América Latina y el Caribe se situó en un 48.5% en 2021, una cifra inferior en comparación con la participación masculina, que alcanzó un 72.5%.

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