EUROPOL, INTERPOL y ONU unen fuerzas para abordar los delitos ambientales y la crisis climática
La International Initiative of Law Enforcement for Climate (I2LEC), una destacada colaboración entre el Ministerio del Interior de los Emiratos Árabes Unidos y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), ha dado a conocer la hoja de ruta 2023-2025 que tiene por objeto abordar delitos ambientales y crisis climática en general.
En una reunión del comité directivo de I2LEC, se congregaron socios de diversas entidades, entre ellos UNODC, INTERPOL, la Unidad Ambiental Conjunta UNEP/OCHA, EUROPOL, ESRI, UNPOL y el Ministerio del Interior de los Emiratos Árabes Unidos.
Todos ellos, de forma unánime, llegaron a un acuerdo sobre la vital importancia de la cooperación y coordinación a nivel internacional para afrontar los desafíos que el cambio climático representa en todo el mundo.
“La lucha contra los delitos ambientales se ha convertido en una misión clave de los organismos encargados de hacer cumplir la ley. Durante los últimos 100 años, INTERPOL ha desempeñado un papel de liderazgo en el desarrollo de operaciones policiales internacionales de acuerdo con las amenazas más frecuentes”, asegura Steven Kavanagh, director ejecutivo de servicios policiales en INTERPOL.
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Hoja de ruta
La hoja de ruta 2023-2025 se compone de diversas iniciativas a nivel global, lideradas por distintos miembros del Comité Directivo. Estas destacadas propuestas contemplan la creación de un Libro Blanco enfocado en los delitos ambientales, una evaluación exhaustiva de las necesidades y brechas a nivel mundial.
También, abarca la instauración de un observador de incidentes climáticos de la ONU, el establecimiento de un centro de capacitación global y la implementación de una unidad de operaciones climáticas conjuntas liderada por INTERPOL, con enfoque en la lucha contra los delitos ambientales y el cambio climático.
Cada una de estas iniciativas será coordinada por una organización miembro del Comité Directivo de I2LEC.
“A medida que aumenta el riesgo del cambio climático, nuestra estrategia de seguridad ambiental debe reflejar la escala de la amenaza a la que todos nos enfrentamos. Estamos decididos a aprovechar nuestra experiencia en el cumplimiento ambiental para brindar una respuesta más sólida y operaciones conjuntas globales junto con los socios de I2LEC3”, finalizó Kavanagh.
