Colombia ratifica en Brasil su compromiso por salvar la selva amazónica
En su participación en la Plenaria IV sobre Cambio climático, agroecología y sociobioeconomías en la Cumbre Amazónica de Brasil, Susana Muhamad, ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia, estableció la posición del país en relación a la preservación de la selva amazónica.
Allí, dejó claro lo crucial que resulta la tarea de evitar llegar a un punto de inflexión irreversible, donde realizó énfasis en la aspiración de conservar un 80% de la Amazonía para 2025, según se estableció en la declaración conjunta de los países de la OTCA. Además, resaltó la imperiosa necesidad de reforzar la capacidad gubernamental para hacer frente a este desafío.
“No es posible que los puntos de mayor inequidad social en cada uno de nuestros países estén precisamente en la Amazonía. Sin la dignidad de los pueblos, sin la dignidad de las gentes, sin el reconocimiento pleno de su ciudadanía es imposible recuperar la Amazonía”, aseguró Muhamad.
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Propuestas de Colombia
Punto crítico sin retorno: El objetivo es evitar alcanzar el punto crítico sin retorno. Estamos en consenso en que los países industrializados también deben asumir su responsabilidad, ya que si los niveles de gases de efecto invernadero siguen aumentando, la viabilidad de la Amazonía se verá comprometida.
Conservación del ecosistema para 2025: Se hace un llamado a la fortificación de los territorios, para que puedan encontrar una visión compartida. En Colombia, comparten la convicción de que la meta de proteger el 80% de la Amazonía para el año 2025 debe ser incorporada en la declaración conjunta de los líderes presentes.
Detener la expansión de la frontera petrolera: También comparten la opinión de que la discusión sobre poner un freno a la expansión de la frontera de hidrocarburos debe ser abordada en el marco del diálogo político estratégico.
Mejora de la capacidad gubernamental: Con el fin de reforzar la efectividad de la administración estatal, es necesario abordar la deuda externa para liberar esa carga financiera. Esto permitirá asignar los recursos necesarios para abordar directamente las necesidades del bioma amazónico y proteger su valiosa selva.
La actual situación de deuda excesiva en los Estados involucrados (8 países que comparten dicho ecosistema) limita las posibilidades de inversión en estos objetivos. «Colombia, en particular, se encuentra en una posición en la que no puede comprometer más fondos para llevar a cabo estas iniciativas», asegura la ministra.