Chile propone ley de reciclaje de residuos vegetales para combatir el cambio climático
Maisa Rojas, ministra de Medio Ambiente de Chile, compartió información sobre la propuesta legislativa orientada a fomentar la reutilización de desechos orgánicos, como sobrantes de frutas y hortalizas con el objetivo de disminuir la basura y combatir el cambio climático.
Esta iniciativa, presentada en el EcoParque Peñalolén (espacio dedicado al reciclaje de desechos orgánicos provenientes de mercados locales) contempla opciones como un «vehículo de recolección de residuos vegetales» y la distribución de composteras a la población, entre otras alternativas.
Durante la exposición del proyecto legislativo estuvieron presente Claudio Orrego, gobernador de la Región Metropolitana, Carolina Leitao de Ñuñoa y Emilia Ríos, alcaldesas de Peñalolén, Erika Martínez, alcaldesa de San Miguel, Marcelo Mena, director de Global Methane Hub, Soledad Mella, presidente de la Asociación Movimiento Nacional de Recicladores de Chile y Antonia Biggs, gerente general de la Asociación Nacional de la Industria del Reciclaje.
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Cifras que exigen acción
La ministra Rojas señaló que se calcula que alrededor del 58% de los desechos presentes en las bolsas de basura de los hogares chilenos corresponden a materia orgánica, abarcando restos de vegetales, frutas y material de poda.
Con el propósito de evitar que estos valiosos recursos terminen en los vertederos, esta propuesta busca introducir medidas concretas contemplando la implementación de incentivos y responsabilidades para fomentar la separación de estos residuos vegetales, transformando así un desafío en un beneficio para la comunidad.
“Evitar que los residuos vegetales terminen en rellenos sanitarios tiene varios efectos positivos. Por un lado, podremos alargar la vida útil de los rellenos sanitarios y disminuiremos la generación de metano, potente gas de efecto invernadero que contribuye al cambio climático. Además, al compostar produciremos fertilizantes naturales”, asegura Rojas.
De esta manera, el plan legislativo presenta una gama de alternativas para la administración de los desechos orgánicos. Corresponderá a los municipios ofrecer servicios de recolección directa de residuos vegetales en los domicilios, además de desplegar vehículos especializados dedicados al reciclaje de materia orgánica.
Paralelamente, se estimulará la distribución de composteras y vermicomposteras para uso doméstico, y se impulsará la creación de iniciativas comunitarias o locales de compostaje.