Lanzan el primer textil de poliéster reciclado hecho realmente de poliéster
La marca textil danesa Kvadrat trabajó con el diseñador Teruhiro Yanagihara para lanzar su primer textil de poliéster reciclado fabricado con tejido de desecho, en lugar de las habituales botellas de plástico.
Kvadrat se refiere a Ame como su primer poliéster reciclado «de textil a textil», lo que, según la empresa, es un paso importante para cerrar el círculo dentro del ciclo de vida textil.
Normalmente, los residuos de botellas de plástico PET se convierten en poliéster reciclado, mientras que los residuos de poliéster se convierten en otros productos, un proceso que a veces se conoce como «downcycling», porque el material pierde calidad con cada ronda de reciclado.
En la actualidad, Kvadrat recicla parte de sus residuos textiles para convertirlos en tableros macizos y paneles acústicos, al tiempo que utiliza botellas recicladas para fabricar un textil de poliéster.
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Alternativa prometedora
Para crear un producto textil a partir de residuos textiles, Kvadrat recurrió al reciclado químico, una alternativa prometedora, pero controvertida al reciclado mecánico que abre posibilidades de uso más amplias para los residuos plásticos.
En el método de Kvadrat, conocido como despolimerización, el poliéster se descompone en sus componentes moleculares y luego se reconstruye para recuperar la calidad del material virgen.
Purificado de sus productos químicos y tintes anteriores, el material adopta la forma de virutas de poliéster que se hilan para fabricar el nuevo tejido. Kvadrat utiliza en el proceso una mezcla de residuos de poliéster postconsumo y postindustriales.
Lea Nordström, directora del Laboratorio de Innovación de Kvadrat, dijo: «Para innovar, debemos cambiar la forma en que obtenemos las materias primas y creamos los tejidos. Creemos que el futuro será circular. Y por eso, para Ame, desarrollamos nuestro primer hilo fabricado con residuos textiles de poliéster».
Aunque gran parte del catálogo de Kvadrat se fabrica con fibras naturales, el poliéster suele elegirse para los textiles de alto rendimiento porque es duradero, resistente a la luz y al estiramiento, el encogimiento y las arrugas.
Técnica japonesa
Para el look de Ame, Kvadrat se puso en contacto con Yanagihara, atraído por sus investigaciones sobre la Ruta de la Seda y la técnica japonesa de zurcido sashiko, que se utiliza tradicionalmente para reparar kimonos.
«Ame es una innovación hecha enteramente a partir de residuos textiles y una bonita conexión con el sashiko, una antigua técnica de reparación que también consiste en preservar piezas de tejido», explicó Stine Find Osther, vicepresidente de Diseño de Kvadrat a Dezeen.
El diseño de Yanagihara para Ame consiste en entrelazar dos colores y grosores de hilo diferentes para crear un delicado patrón que recuerda a la costura a mano. La paleta de colores también se inspira en un aspecto de la vestimenta tradicional japonesa conocido como «kasane no irome», que se refiere a la superposición de kimonos en combinaciones precisas de colores.
Las tecnologías de reciclado químico son controvertidas, sobre todo porque generan grandes cantidades de residuos y emisiones tóxicas, de modo que los críticos sostienen que se hace más mal que bien.
El proceso de despolimerización utilizado por Kvadrat requiere la aplicación de altas temperaturas y productos químicos. La marca admite que el consumo de energía es elevado, pero espera que mejore con el tiempo.
«Siempre se necesitará una gran cantidad de energía para facilitar cualquier innovación sostenible, sobre todo al principio, hasta que se dominen los volúmenes y el flujo adecuados», afirmó Osther.
«Pero tal y como nosotros lo vemos, es esencial disminuir la cantidad de material virgen basado en combustibles fósiles que utilizamos, ya sea reciclado o de base biológica. Necesitaremos ambos en el futuro», concluyó.
