Conexión Jaguar: el proyecto de ISA para mitigar el cambio climático

ISA, la empresa mixta colombiana de generación y comercialización de energía, vías y telecomunicaciones, intenta mantener una estrategia de sostenibilidad responsable que se sostiene en el pilar de la mitigación. Con ese objetivo en mente, creó en 2017 el programa Conexión Jaguar, que trabaja con pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta a fin de apoyarlos en la creación de proyectos productivos sostenibles.

Esta iniciativa, con el jaguar como símbolo, busca crear una base de desarrollo a nivel forestal, una de las áreas más amenazadas en Colombia por el cambio climático.

En ISA aseguran que estos programas contribuyen a reducir un potencial de 6 millones de toneladas de emisiones de CO2. Al mismo tiempo que protegen y restauran un millón de hectáreas de bosque en la región, beneficiando a cientos de familias.

El objetivo de Conexión Jaguar a 2030 es trabajar con 20 iniciativas de conservación y reforestación, con lo que se espera reducir 9 millones de toneladas de CO2.

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ISA y el desarrollo de sostenibilidad forestal

El proyecto surgió como una idea para realizar trabajos dedicados a nivel local en los bosques del Corredor Jaguar. Esto corredor recopila bosques interconectados en los que habita el jaguar y que forma parte de Colombia.

Para lograr su cometido, ISA ha unido esfuerzos con South Pole y Panthera, que colaboran como aliados técnicos. Gracias a esta alianza, las tres instituciones llevan conocimientos forestales a las comunidades que habitan el corredor en Colombia.

El objetivo final de Conexión Jaguar consiste en poner su conocimiento y recursos al servicio de comunidades y empresas que buscan hacer de los territorios donde viven y operan espacios de recuperación agroforestal sostenibles y rentables.

“Con este programa nos ocupamos de crear valor sostenible promoviendo iniciativas que generen un impacto ambiental y social positivo, mediante la gestión de nuestra Estrategia ISA2030, al mismo tiempo que establecemos relaciones de confianza con las comunidades en nuestras zonas de influencia. Además, como empresa, tenemos una clara voluntad de operar nuestros negocios en un marco de desarrollo ambientalmente sostenible y contribuir de una manera decidida a cumplir las metas globales de la agenda 2030 como el Acuerdo de París, el Convenio sobre la Biodiversidad Biológica y los Objetivos de Desarrollo Sostenible”

María Adelaida Correa, directora Corporativa de Sostenibilidad de ISA.

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Bosques con propósito

Con las intervenciones del programa, ISA no solo comparte conocimientos de reforestación y restauración a comunidades, sino que abre las puertas a un mercado internacional de sostenibilidad. Esto se refiere a la creación de créditos de carbono (tipificados por ISA como bonos), los cuales se crean al impulsar proyectos que mitiguen emisiones. De esta forma, una empresa puede mitigar las emisiones que genera con carbono que queda atrapado en los bosques que siembra y cuida.

En consecuencia, las utilidades contribuyen a que los proyectos sean rentables, se sigan generando iniciativas que impacten positivamente el ambiente y las comunidades encuentren una actividad productiva y sostenible.

ISA busca también proteger el hábitat del jaguar, que se encuentra en la lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

Conexión Jaguar: iniciativa de transformación rural

La meta de mantener 20 proyectos activos para el año 2030 por el momento parece alcanzable. Desde 2017 se han desarrollado 6 planes que continúan activos y los impactos de éstos son destacables. En este sentido, además de las toneladas de CO2 mitigadas y las 300 familias impactadas, se suman avances en biodiversidad.

Sobresalen, por ejemplo, las 784.000 hectáreas protegidas, 167 especies de fauna registradas y un potencial de reducción de más de 6 millones de toneladas de CO2 entre los siete proyectos forestales apoyados en Colombia, Brasil y Perú.

Además, de forma complementaria a la meta de 2030, el Grupo reducirá 2 millones más mediante acciones de ecoeficiencia, movilidad sostenible y el uso eficiente de recursos, como parte de su apuesta para ser carbono neutral en 2022, aseguran.

Además del jaguar, la compañía también mira con detenimiento la conservación del paujil pico azul, otra de las especies más amenazadas de los bosques. Con estas especies en mente, su último proyecto junto a la Compañía Colombiana de Cacao en Cimitarra, Santander, ha creado un territorio de reforestación enorme.

Específicamente, la compañía destinó 400 hectáreas a la reforestación y recuperación de tierras que habían sido degradadas por actividades ganaderas.

 “Ha sido una experiencia fascinante. Inicialmente fue un reto convencer a nuestros accionistas y a la junta directiva de reservar un área de la finca no para sembrar sino para reforestar. Junto con Panthera instalamos unas cámaras trampa en el terreno y fue una gran sorpresa descubrir cinco especies en vía de extinción como el jaguar y el paujil pico azul. Eso nos permitió argumentar que valía la pena apostarle a la conservación”

Sergio Villa, gerente de la Compañía Colombiana de Cacao

Desde ISA aseguran que el programa Conexión Jaguar y su proyecto en Santander genera en el lugar alrededor de 200 empleos formales y la comunidad desempeña un papel fundamental en su mantenimiento.

Asimismo, el programa incluye un factor de reforestación para acompañar a la especie de árbol dominante en la zona, en este caso el cacao. Por ello han reforestado con 1.200 árboles de matarratón y 300 de abarco. En el futuro se espera que el alcance de Conexión Jaguar sea replicable y escalable, lo que pondría a los 20 proyectos presupuestados al alcance de la mano antes del 2030, un avance de grandes proporciones para la agricultura y mantenimiento forestal.

Redacción I José Luis Álvarez Escontrela