Los manglares toman protagonismo en la COP28 con participación de CAF
En la COP28, la atención se centró en el pabellón dedicado a América Latina y el Caribe, con participación de CAF, destacando los manglares como el ecosistema del día, altamente productivos y fundamentales para la cadena alimentaria estuarina.
Además, desempeñan un rol clave en la vida de cerca del 70% de los organismos marinos, e incluso, aportan servicios ecosistémicos valuados en al menos 1.600 millones de dólares anuales. Así, durante la primera sesión de diálogo, titulada «Somos Manglares y Humedales, Somos Solución», diversos expertos compartieron sus perspectivas.
Los participantes discutieron la importancia de abordar de manera proactiva los desafíos relacionados con los manglares, elevando la necesidad de proyectos, financiamiento y líneas base.
Contenido relacionado: CAF destinará $15.000 millones para adaptación y gestión de riesgos de desastres naturales
Además, se abordaron temas clave como el género, enfatizando la importancia de empoderar a las comunidades en su conjunto, para que el cuidado de los manglares no recaiga exclusivamente en las mujeres, sino que sea responsabilidad compartida.
Participación de CAF
En el segundo segmento del evento, titulado «Manglares y Carbono Azul: Una Oportunidad para Impulsar la Economía Azul», Alicia Montalvo, gerente de acción climática y biodiversidad positiva de CAF, compartió las iniciativas del banco en el ámbito de la economía azul.
Montalvo destacó el compromiso de destinar $1.250 millones de dólares hasta 2026 para fomentar los ecosistemas marinos, reconociendo el papel de los manglares en la mitigación del cambio climático al tener una notable capacidad para capturar carbono.
Asimismo, sirven como barreras naturales para la protección costera y sustentan la vida de las comunidades al proporcionar recursos naturales para la pesca y el turismo. Finalmente, el último panel de expertos conversó acerca de experiencias, perspectivas y tendencias en proyectos de carbono azul.
Allí, se exploraron las oportunidades para conservar y restaurar los ecosistemas de manglares, destacando la importancia de la participación activa de las comunidades costeras en estas iniciativas.