AIMPLAS avanza en el reciclaje de residuos de mezclas algodón-poliéster

Los desechos textiles que combinan poliéster y algodón, comúnmente empleados en la industria textil, a menudo se encuentran con dos opciones al final de su vida útil: la incineración o la disposición en vertederos. Ahora, para hacer frente a este desafío, AIMPLAS se ha involucrado en el proyecto RECIMAP.

El mismo tiene como objetivo explorar nuevas estrategias para manejar los desechos plásticos complejos, como los textiles que contienen mezclas de algodón y poliéster. El objetivo final es impulsar una economía circular sostenible en el sector textil.

En ese sentido, la investigación está siendo liderada por Bespoke Factory Group, con financiamiento de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI). Además de AIMPLAS, la Universidad de Valencia, y el Consorcio Valencia Interior V3 también están involucrados en este proyecto.

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(Crédito: AIMPLAS)

AIMPLAS: Detalles sobre RECIMAP

Específicamente, se está investigando una metodología de reciclaje que convierte estos residuos complejos en materiales reciclados de primera calidad y ácido láctico, este último, componente esencial en la producción de ácido poliláctico (PLA).

Así, RECIMAP se concentra en la separación selectiva de las mezclas de algodón y poliéster utilizando líquidos iónicos, alternativa más ecológica que los solventes convencionales. Allí, el poliéster será reciclado mediante técnicas mecanoquímicas para obtener un producto reciclado de alta calidad, mientras que la fracción de algodón será empleada en la producción de ácido láctico a través de un proceso de fermentación ácido-láctica.

El ácido láctico es un producto altamente valorado y con una alta demanda en la industria del plástico, especialmente como componente del PLA.

“El proyecto RECIMAP contribuye significativamente a la economía circular, ya que la cantidad de residuos textiles que se recogerán en los próximos años se prevé que siga aumentando, en parte debido a las regulaciones europeas relacionadas con la responsabilidad ampliada del productor (RAP). Esto plantea la necesidad de encontrar soluciones efectivas para estos residuos y brinda oportunidades a las empresas valencianas para mejorar su competitividad”, afirma Belén Taroncher, investigadora de reciclado químico en AIMPLAS.

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