Brasil recibe $300 millones del BID para la protección de la selva amazónica
El Estado de Pará, en Brasil, recibió un préstamo de reformas de políticas por valor de 300 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), respaldando los esfuerzos del estado para alcanzar la meta de cero emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) para 2050.
La aprobación de esta operación representa la primera intervención del BID en la implementación de políticas económicas, ambientales, sociales y climáticas a nivel subnacional en Brasil, con el propósito principal de promover el desarrollo sostenible en la región amazónica.
Desde 2017, BID ha estado trabajando en estrecha colaboración con el Estado de Pará, cuya capital, Belém, será la sede de la COP30.
Ante ello, la colaboración entre ambas partes se centra en abordar de manera integral y transversal el desafío complejo de erradicar la deforestación ilegal.
En este esfuerzo conjunto, participan diez instituciones gubernamentales y cinco divisiones sectoriales del BID, demostrando así un sólido compromiso con la descarbonización de Pará.
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Detalles del crédito de BID
Con la aprobación del crédito por parte del directorio ejecutivo del BID, se facilitará la mejora de las capacidades técnicas y la provisión de tecnología necesaria para la implementación de políticas ambientales y climáticas en el Estado de Pará.
Además, se tiene previsto fortalecer el enfoque de Soluciones Basadas en la Naturaleza (SBN) con el fin de mejorar la gestión de las zonas protegidas, implementar un manejo integral en las áreas costeras y fomentar la economía azul.
Asimismo, se buscará la recuperación de vegetación en terrenos degradados. Entre los objetivos adicionales se encuentra la promoción de prácticas agropecuarias de bajo carbono y el impulso al desarrollo de la bioeconomía, con impactos significativos en el uso sostenible de la tierra.
Adicionalmente, dentro del préstamo se incluye la creación de instrumentos fiscales y financieros diseñados para respaldar la descarbonización de Pará, llevando a cabo una alineación de los beneficios fiscales del Estado con proyectos de bajo carbono, buscando incentivar iniciativas que contribuyan a la reducción de emisiones.
Finalmente, se fortalecerán los mecanismos de monitoreo de mercancías para restringir el tráfico de productos originados en tierras deforestadas ilegalmente, reforzando de esta manera el compromiso con la sostenibilidad ambiental y la lucha contra la deforestación ilícita.
