Antonio Guterres: «El último informe del IPCC revela una letanía de promesas climáticas incumplidas»
El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, reaccionó a la publicación de un nuevo informe delGrupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático(IPCC, por sus siglas en inglés), describiéndola como una «letanía de promesas incumplidas», y acusó a los gobiernos y líderes empresariales de «echar más leña al fuego» mediante inversiones históricas en combustibles fósiles.
En respuesta a las últimas conclusiones de IPCC, Guterres insistió en que, a menos que los gobiernos de todo el mundo reevalúen sus políticas energéticas, el mundo será inhabitable.
Sus comentarios reflejan la insistencia del grupo en que todos los países deben reducir sustancialmente su uso de combustibles fósiles; ampliar el acceso a la electricidad; mejorar la eficiencia energética, y aumentar el uso de combustibles alternativos, como el hidrógeno.
«Si no se toman medidas pronto, algunas ciudades importantes quedarán bajo el agua», dijo Guterres en un mensaje de vídeo (a continuación), en el que también pronosticó «olas de calor sin precedentes, tormentas aterradoras, escasez de agua generalizada y la extinción de un millón de especies de plantas y animales».
El Secretario General de la ONU añadió que: «Esto no es ficción ni exageración. Es lo que la ciencia nos dice que resultará de nuestras actuales políticas energéticas. Estamos en camino de un calentamiento global de más del doble del límite de 1,5 grados (Celsius, o 2,7 grados Fahreinheit) que se acordó en París en 2015″.
El informe del IPCC, redactado por cientos de científicos de renombre y acordado por 195 países, aporta las pruebas científicas que respaldan esta evaluación condenatoria y señala que las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad humana han aumentado desde 2010 «en todos los principales sectores a nivel mundial».
Intensificar medidas
Los autores afirman que una parte cada vez mayor de las emisiones se debe a las ciudades, y añaden que la reducción de las emisiones en la última década «ha sido menor que el aumento, debido al incremento de la actividad global en la industria, el suministro de energía, el transporte, la agricultura y los edificios».
Sin embargo, IPCC insiste que todavía es posible reducir las emisiones a la mitad para 2030, e instó a los gobiernos a intensificar las medidas para frenar la contaminación. Además, resaltó la importante disminución del costo de las fuentes de energía renovables desde 2010, hasta 85% en el caso de la energía solar y eólica, y de las baterías.
«Estamos en una encrucijada. Las decisiones que tomemos ahora pueden asegurar un futuro habitable. Me anima la acción climática que se está llevando a cabo en muchos países, donde hay políticas, normativas e instrumentos de mercado que están resultando eficaces. Si se amplían y aplican de forma más amplia y equitativa, pueden apoyar una profunda reducción de las emisiones y estimular la innovación», dijo el presidente del IPCC, Hoesung Lee.
Para limitar el calentamiento global a alrededor de 1,5C (2,7°F), el informe del IPCC insistió en que las emisiones globales de gases de efecto invernadero tendrían que alcanzar su punto máximo «antes de 2025 a más tardar, y reducirse en un 43% para 2030».
Los autores del informe también señalan que las emisiones tendrían que reducirse en un tercio aproximadamente, y añadieron que, incluso si esto se consigue, es «casi inevitable que superemos temporalmente este umbral de temperatura, aunque el mundo podría volver a estar por debajo de él a finales de siglo».
Acciones inmediatas
La temperatura mundial se estabilizará cuando las emisiones de dióxido de carbono alcancen el nivel cero neto. Para 1,5 °C significa alcanzar emisiones netas a nivel mundial a principios de la década de 2050; para 2°C, a principios de la década de 2070, afirma el IPCC.
Entre las soluciones sostenibles y de reducción de emisiones que están a disposición de los gobiernos, el informe subraya que repensar el funcionamiento de las ciudades y otras zonas urbanas en el futuro podría ayudar significativamente a mitigar los peores efectos del cambio climático.
«Las reducciones pueden lograrse a través de un menor consumo de energía, como la creación de ciudades compactas y transitables; la electrificación del transporte junto a fuentes de energía de bajas emisiones, y una mayor captación y almacenamiento de carbono utilizando la naturaleza», sugiere el informe.
«Las políticas, infraestructuras y tecnologías adecuadas para permitir cambios en nuestros estilos de vida y comportamientos, pueden dar lugar a una reducción de entre el 40% y el 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2050. Las pruebas también demuestran que estos cambios pueden mejorar nuestra salud y bienestar»
Priyadarshi Shukla, copresidente del Grupo de Trabajo III del IPCC
Si deseas leer el informe de IPCC, haz clic aquí
También te puede interesar: La selva amazónica se acerca a un «punto de inflexión crítico» según nuevo estudio
Redacción | Antonio Vilela